top of page

Alienación parental en Puerto Rico: señales tempranas y consecuencias legales

  • Writer: Yarilyn Claudio
    Yarilyn Claudio
  • Sep 19
  • 4 min read

Updated: Sep 22


Alienación parental en Puerto Rico


En Puerto Rico, cada día más padres enfrentan una realidad dolorosa: el uso de los hijos como armas emocionales en disputas de pareja. Este fenómeno, conocido como alienación parental, ocurre cuando uno de los progenitores manipula la percepción del menor para que rechace, tema o desprecie al otro progenitor.


La Ley Núm. 70 de 2020 reconoce la alienación parental como una amenaza seria al bienestar de los menores y permite al tribunal imponer medidas como la remoción de custodia, la obligación de terapia psicológica y el pago de gastos para reparar el daño emocional causado.


Hoy, desde la perspectiva de los abogados de familia en Puerto Rico, queremos analizar este tema, sus manifestaciones más comunes y las señales tempranas que deben encender alarmas en cualquier padre.

 

¿Qué es la alienación parental?

La alienación parental es un proceso de manipulación psicológica. A través de críticas, descalificaciones, mentiras o incluso el control de la información que recibe el menor, un progenitor logra que el hijo desarrolle rechazo hacia el otro.


Este rechazo no surge de experiencias propias del menor, sino de la narrativa impuesta por el progenitor alienador. La consecuencia directa es la ruptura del vínculo filial, algo que la ley y la psicología reconocen como un daño profundo y duradero.

 

El marco legal en Puerto Rico

El Estado Libre Asociado de Puerto Rico ha adoptado medidas claras para combatir este problema:

•   Ley Núm. 70 de 2020: establece sanciones y medidas correctivas en casos de alienación parental, siempre bajo el principio de proteger los mejores intereses del menor.

•  Política pública: reconoce que todo niño tiene derecho a mantener relaciones significativas con ambos progenitores, salvo que exista causa legítima para restringirlas.

•  Ley Núm. 57 de 2023: protege a los menores de material nocivo y reafirma su derecho a la intimidad, la dignidad y un entorno sano para su desarrollo físico, emocional y social.


Ambos marcos legales son complementarios: la alienación parental no solo rompe la relación con un progenitor, sino que también vulnera el derecho del menor a vivir en un entorno emocionalmente seguro.

 

Señales tempranas de alienación parental

Uno de los mayores retos para los tribunales y los profesionales del derecho es identificar la alienación parental en sus etapas iniciales. A continuación, algunas señales que deben encender las alarmas:

1.  Críticas constantes al otro progenitor

El menor repite frases negativas o despectivas hacia uno de los padres, sin tener experiencias propias que justifiquen ese sentimiento.

2.  Obstaculización de las visitas y convivencias

Se imponen excusas recurrentes: el niño “está enfermo”, “no quiere ir” o “tiene compromisos”, siempre en los días que corresponden al otro progenitor.

3.  Exposición en redes sociales sin consentimiento

Un ejemplo concreto que hemos visto en los tribunales: publicar fotos de los menores sin autorización, incluso imágenes delicadas o editadas, para proyectar un mensaje parcializado de “buena crianza” y marginar al otro progenitor.

4.  Preferencia exagerada por un solo progenitor

El menor expresa lealtad extrema hacia uno de los padres y rechazo absoluto hacia el otro, incluso en situaciones donde antes había cariño y apego.

5.  Interferencia en la comunicación

Se bloquean llamadas, mensajes o cualquier forma de contacto con el progenitor rechazado.

6.  Uso de los menores como mensajeros


El niño es obligado a transmitir críticas, amenazas o condiciones entre los padres.

Estas señales no deben ser ignoradas. Cuando aparecen de forma reiterada, pueden estar marcando el inicio de un patrón de alienación parental.

 

Consecuencias de la alienación parental

Los tribunales en Puerto Rico cuentan con diversas herramientas para responder a estos casos:

•    Remoción de custodia: si se prueba la alienación parental, el progenitor infractor puede perder la custodia del menor.

•    Terapia psicológica: tanto el menor como el progenitor pueden ser obligados a recibir tratamiento para reparar los daños emocionales.

•    Responsabilidad económica: el progenitor que incurra en alienación parental puede ser obligado a cubrir los costos de las terapias necesarias.

•    Órdenes cautelares adicionales: los jueces tienen discreción para emitir órdenes específicas que protejan al menor en cualquier etapa del proceso.

 

El impacto emocional en los menores

Más allá de las sanciones legales, la alienación parental deja cicatrices emocionales en los niños. Al crecer en un ambiente de manipulación, los menores pueden desarrollar:

•    Problemas de autoestima.

•    Dificultades para confiar en los demás.

•    Sentimientos de culpa y ansiedad.

•    Relaciones interpersonales conflictivas en la adultez.


Esto confirma que la alienación parental no es un conflicto entre adultos: es una forma de maltrato emocional contra los menores.

 

Un llamado a la acción

Como abogados de familia en Puerto Rico, recalcamos la importancia de actuar ante las primeras señales de alienación parental. Ignorar el problema permite que se arraigue y que las consecuencias sean mucho más difíciles de revertir.


Los tribunales están cada vez más conscientes de estas dinámicas y cuentan con el marco legal para intervenir. Pero la primera línea de defensa está en los progenitores responsables que reconocen estas señales y buscan orientación legal a tiempo.

 

Conclusión

La alienación parental es un arma de doble filo que divide familias y lastima a los más vulnerables: los menores. Puerto Rico cuenta con leyes como la Ley 70 de 2020 y la Ley 57 de 2023 para enfrentar este problema, pero el éxito depende de que los padres y los profesionales del derecho denuncien y actúen con firmeza.


La recomendación es clara: si observas conductas de alienación parental —desde críticas constantes hasta publicaciones indebidas en redes sociales— no lo tomes como un simple desacuerdo familiar. Es una alerta de que los derechos y la salud emocional de un menor están en riesgo.


Los menores necesitan crecer en un entorno seguro, con vínculos sanos con ambos progenitores. Y ese derecho, en Puerto Rico, no se negocia.


Comments



TERMINOS Y CONDICIONES DE USO 

INFORMACIÓN RELEVANTE Es requisito necesario para la adquisición de los servicios que se ofrecen en este sitio, que lea y acepte los siguientes Términos y Condiciones que a continuación se redactan.

  • Instagram
  • Facebook

 
POLÍTICA DE PRIVACIDAD
La presente Política de Privacidad establece los términos en que Lcda. Yarilyn Claudio López usa y protege la información que es proporcionada por sus usuarios al momento de utilizar su sitio web. Esta compañía está comprometida con la seguridad de los datos de sus usuarios

bottom of page